Formando parte de la Reserva de la Biosfera de Picos, en este espectacular entorno de pastos y montañas fue fundada Javier Campo en el año 2005, una quesería artesanal que ofrece un producto de calidad excelente gracias a su elaboración tradicional a base de ingredientes naturales.
El carácter abrupto del paisaje que nos rodea dio lugar a un aislamiento geográfico que ha permitido que se mantengan aún las viejas tradiciones. Como la de la fabricación del queso con denominación de origen propia, Picón Bejes-Tresviso, protegida desde 1994. Los quesos se elaboran siguiendo una tradición centenaria que ha pasado de generación en generación a lo largo de los siglos. Esto, unido a los pastos de alta montaña que las vacas comen la mayor parte del año, les da ese sabor salvaje que recuerda la espectacularidad de los Picos de Europa. Surge así un queso azul, de sabor fuerte, picante, mantecoso, con mucha personalidad y aspecto untuoso.
Tal objetivo lo conseguimos mediante el continuo cuidado que dedicamos a todo el proceso, desde encargarnos de utilizar la mejor leche cruda hasta vigilar el proceso final de curado. Nuestras vacas pardas de leche, pacen apaciblemente en la época del año que hay pasto, logrando así que una alimentación natural y vida tranquila repercutan luego en la calidad de la leche. A ello debemos sumarle que la ganadería está situada a pocos metros de la quesería, evitando así que la leche pueda sufrir algún daño en el transporte.
Nuestras instalaciones son modernas y totalmente actualizadas, cumpliendo con la normativa de higiene y calidad establecidas, sin renunciar por ello al proceso de elaboración tradicional y de uso de ingredientes únicamente naturales del que hacemos gala. Para mantener estos exigentes cánones de calidad que nos hemos marcado, la producción anual de los quesos es limitada.
